viernes, 8 de mayo de 2015

Vaca fue la muralla inexpugnable



Espectacular esfuerzo de Vaca, tras un remate celeste.

El arquero atigrado Daniel Vaca ahogó en varias ocasiones el grito de gol de los jugadores de Bolívar. La magnífica actuación junto con sus compañeros en la zona defensiva ayudó para ganar el clásico paceño por 1-0.

Vaca no fue exigido en la primera parte, debido que el rival careció de jugadas ofensivas, pero cuando le llegaron demostró que es uno de los mejores arqueros en el país.

“Feliz porque ganamos al rival de siempre. Más que todo se debe al trabajo que uno está haciendo y estuvimos acertados y la ubicación fue fundamental”, dijo el arquero.

En el segundo tiempo, el arquero atigrado contribuyó en la obtención de los puntos, tras marcar el volante Alejandro Chumacero, a los 14 minutos. A partir de ese momento la figura de Vaca sobresalió por encima de cualquier otro jugador.

La primera atajada fue con el tiro libre de Jhasmani Campos. La segunda, el volante de Bolívar, José Luis Capdevilla intentó con un remate de media distancia, de rabona, pero la salvada fue espectacular de Vaca. La tercera estuvo en los pies de Juan Miguel Callejón con un remate cruzado, pero el arquero lo envió al tiro de esquina.

La última la tuvo Juan Carlos Arce que quiso enviar un centro retrasado, pero las manos del número uno del Tigre, de nuevo, evitó el tanto del empate. “Creo que hicimos un gran trabajo colectivo y conseguimos tres puntos que nos permiten estar cerca la Copa Libertadores”, indicó.

El guardameta junto con sus compañeros festejó en la curva Sur del estadio Hernando Siles, lugar donde se ubican la hinchada atigrada. “Tenemos que fortalecernos nosotros y hemos demostrado que contra un clásico rival con mucho amor propio y actitud. Uno tiene que estar enchufado y contento porque estábamos acertados”, finalizó.

Pablo Escobar fue uno de los más eufóricos al final del partido, se abrazó con Ernesto Cristaldo, con quienes gritaron “no podíar la vuelta olímpica con nosotros, la darán el domingo pero no con nosotros”.

Escobar elogió a sus compañeros, “es un grupo humilde y bastante unido, por eso la alegría de haber logrado este triunfo, es la quinta Copa Libertadores consecutiva que conseguimos, creo quehemos demostrado que no hay que festejar antes de tiempo y que el Tigre como siempre nunca baja los brazos ni hay que darlo por muerto”.

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