Bejarano tiene contrato hasta el 1 de julio del 2018 y ayer se tenía que presentar a la pretemporada, pero según el presidente César Salinas pidió un permiso.
Sin embargo, anoche sorprendió con una carta que indica que tiene el dinero para pagar la claúsula de rescisión y quedar libre.
“En cuya claúsula séptima (incumplimiento o rescisión de contrato) se estipula el monto de $us 100.000, que mi persona (Diego Bejarano) debe honrar en favor de dicho club”, indica en el primer párrafo de la carta enviada a Ribera.
La misma agrega que, “adjunto constancia del déposito bancario (de los $us 100.000) efectuado hoy (ayer) por mi persona en la cuenta bancaria de la Liga del Fútbol Profesional Boliviano (LFPB)”.
De esa manera, Bejarano pidió ser liberado del club atigrado, de inmediato. para tener la opción de elegir al equipo de su preferencia.
“Deportes El Diario” se enteró ayer que la dirigencia paceña está molesta con el accionar de Bejarano.
La dirigencia estaba dispuesta a aumentar el monto de su salario en una reunión que iba a sostener con el jugador la próxima semana, debido que existía la confianza que se quedaría a cumplir su contrato para pelear el título local y llegar lo más lejos posible en la Copa Libertadores de América en este 2018.
“Es una pena de la forma que se va Diego Bejarano, pero cada jugador que se así del Tigre le llega una maldición”, dijo el presidente Salinas en el programa televisivo DXTV.
Agregó, Salinas que salió por “la ventana” y que hará todo lo necesario para dejarlo “colgado” al jugador por la manera en la que se comportó con la institución atigrada.
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