“Las dos pelotas paradas que terminaron en gol no hubo falta; en una cobró una mano inexistente, en otra hubo una falta que no existió y hubo tres jugadores en off side, me remito a las imágenes”, señaló Escobar.
Para más abundamiento, dijo que el juego brusco se vio refleajado en el hecho de que Diego Wayar “está quebrado”, y para colmo, el árbitro no cobró la infracción a su compañero.
Puso énfasis en el hecho de que el gol de Jhasmani Campos, el primero de Sport Boys, se originó en una dudosa mano de Luis Maldonado que el árbitro Mancilla pitó como falta. Además, reiteró que el gol del empate de Perozo, se dio cuando estaba en flagrante posición adelantada.
“Es triste y lamentable que el árbitraje nos perjudique constantemente, no estoy bien ni estoy tranquilo, estoy preocupado con eso”, remarcó el símbolo atigrado, quien estuvo con el rostro bastante serio, en la conferencia de prensa que dio en Achumani.
Expresó que antes “frecuentemente nos cobraron mal, (Raúl) Orosco en el campeonato pasado, cuando me suspendieron tres fechas a mi”.
Si bien en el encuentro ante Wilstermann, cuando el Tigre ganó de visitante, “también el arbitraje no fue de los mejores, pero el resultado tapa muchas cosas”. Pero, recalcó que el arbitraje del sábado, ante Sport Boys, “fue vergonzoso”. En este sentido, expresó su esperanza de que el arbitraje pueda mejorar para bien del fútbol boliviano. Eso sí, Escobar también fue claro en mencionar que “el rival y los jugadores de Sport Boys no tuvieron nada que ver, pero es reiterativo ante The Strongest y ya con jugadores lesionados, parecería que nos quieren perjudicar”.
De todos modos, expresó su deseo porque esta situación cambie y no sean perjudicados.
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