El Tigre sigue sumando de visitante. Ayer por la tarde, en el estadio de ACF, empató 2-2 con Sport Boys de Warnes, un encuentro que bien lo pudo liquidar en el primer tiempo, pero permitió la recuperación del “toro” warneño, y al final estuvo cerca de terminar con el marcador en contra.
Por lo hecho por el “Tigre” en el primer tiempo y por el “toro” en el segundo, el resultado puede calificarse de justo, pero el plantel paceño tuvo a un paso del KO en el primer tiempo a Sport Boys.
Con un sistema táctico bastante ofensivo, prácticamente arrinconó a su rival, al que de entrada, sobre los 6 minutos del primer tiempo, lo tuvo con el marcador en contra. Un centro desde la izquierda de Matías Alonso fue bien aprovechado por Luis Maldonado, quien se anticipó a los defensores y anotó el 1-0, temprano.
Parecía que el Tigre iba a terminar de noquear a los warneños, porque a los 14 minutos, Diego Bejarano, recibió un rebote por la derecha, le pegó de media volea y el balón se anidó al fondo de las redes.
Sin embargo, Sport Boys poco a poco le tomó el pulso al partido, sobre todo por la feroz arremetida de Jhasmani Campos, quien mostró bastante amor propio y sacó a relucir su potente remate de zurda. A los 28 minutos, el árbitro Alejandro Mancilla pitó penal una falta de Wayar a Campos, un minuto después, Edivaldo desperdició esa clara opción, porque su remate fue intuido por Vaca, quien tras el rebote atajó el balón en medio de la desazón de Xabier Azkargorta y compañía.
A propósito del entrenador vasco, éste observaba desde un costado el campo de juego, con evidente preocupación el desenlace del encuentro. El trámite lo cambió Jhasmani Campos, quien a los 46 minutos, anotó tras rematar un tiro libre, el balón pegó en la barrera, le dio justo para que con pierna zurda remate al fondo de las redes, si bien Vaca estuvo cerca de atajar, el rebote del balón lo engañó, y al final del primer tiempo, la diferencia se hizo 1-2, a favor del Tigre.
En el segundo tiempo, fue el “toro” el que propuso más, con un Campos que no solo mostraba actitud, sino que también marcaba la diferencia en el campo de juego.
Al minuto de iniciado el segundo tiempo, otro centro cobrado por Campos, encontró la cabeza de Edivaldo, su cabezazo fue desviado a medias por Vaca, el balón encontró la zurda del venezolano Perozo, quien de zurda anotó el 2-2.
Fue el momento en que todo le fue favorable al conjunto local, que por cierto, no tenía barra en el estadio de la ACF.
Mientras el Tigre intentaba equilibrar las acciones, pero al mismo tiempo los locales intentaban seguir creando opciones de gol.
Los minutos fueron pasando, con un Campos que probaba desde diferentes posiciones, pero el arco se le había cerrado en la etapa final.
El cuadro atigrado intentó recomponer sus líneas, al final se contentó con el empate, mientras el local masculló de nuevo su bronca.
No hay comentarios:
Publicar un comentario