Llegó a la docena a pura garra. The Strongest levantó la copa del torneo Apertura 2016 tras una campaña excepcional al mando de César Farías. El Tigre derrotó a Bolívar por 2-1 este sábado en el Hernando Siles, de La Paz. Fue el título número 12 en la historia de la Liga del Fútbol Profesional Boliviano.
Para el campeón marcaron Fabricio Pedrozo (31') y Pablo Daniel Escobar (73'). Descontó Juan Miguel Callejón (87'). Los de Achumani se aseguraron un cupo en la Copa Libertadores de 2018.
Liderados por el paraguayo-boliviano Escobar desde el inicio del juego los de Achumani fueron superiores a una academia diezmada por la falta de figuras importantes como la de Juan Carlos Arce y Gastón Cellerino, ambos expulsados en la fecha pasada ante Sport Boys.
Antes de la apertura del marcador, Marvin Bejarano y Wálter Veizaga fallaron claras chances de gol. Bejarano (11') no pudo conectar de cabeza tras centro de Escobar, mientras que Veizaga (24') remató de primera por encima del horizontal de Vaca. La jugada nació en los pies de Castro, que metió un balón en profundidad para Diego Bejarano. El lateral controló y sacó un centro rasante, que Veizaga la mandó a las graderías.
Bolívar jugaba con limitaciones en la zona de ataque y con muchos yerros en la última línea. Era un equipo partido, con pocas ideas, lejos del nivel que lo llevó a la final. A los 30 minutos recién tuvo una oportunidad tras falla de Vaca. Al meta se le pasó el balón por encima tras rebotar el balón en el piso (salió tarde) pero Juan Miguel Callejón no pudo controlar en dos tiempos cuando estaba solo. El esférico se le fue por la línea de fondo.
En la contra llegó la apertura del marcador. El argentino Pedrozo hizo estallar al Siles con el primero apenas un minuto después (31'). El delantero aprovechó una falla de la defensa celeste para hacer rugir al Tigre con el primer zarpazo (1-0). Cabrera y Eguino se estorbaron. El mal rechazo fue aprovechado por Pedrozo para anidar el balón de derecha al fondo del arco de Zamora.
A la vuelta de los vestuarios, el Tigre salió decidido a comerse al rival, ya que enfrente tenía a una academia visiblemente rendida. Sin piernas y sin peso ofensivo. Callejón el hombre más importante por momento quedó aislado. Extrañó la sociedad que solía hacer con Arce y Cellerino.
En los pies de Chumacero estuvo la primera gran oportunidad. El volante paceño remató solo, a los 66 minutos, por encima del horizontal de Zamora. Con la balanza inclinada era cuestión de tiempo que llegue el segundo. A los 73' Escobar, el mejor jugador de la cancha, dio el golpe letal con un toque suave tras pase de Chumacero.
Sobre el final y cuando los hinchas atigrados celebraban en las graderías su mejor regalo de Navidad llegó el descuento de Callejón (87'), solo para las estadísticas porque no hubo tiempo para más. Guery Vargas pitó el final del partido y el Tigre gritó campeón.
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