Los hinchas de B.A.R.A. (Brigada Aurinegra Resistencia Antifascista), uno de los grupos que integran la Ultra Sur 34, la barra organizada del club The Strongest, festejaron con más fuerza que los otros seis goles el cuarto del Tigre, el segundo de la cuenta personal de Pablo Escobar, en la victoria del lunes por 7-2 sobre Nacional Potosí.
¿El motivo? El capitán atigrado celebró esa conquista en la curva sur, lo hizo señalando una bandera gigante (tres por tres metros) que lleva estampada su figura y que fue pintada por Wilmer Lastra, uno de los barras.
Ese “trapo”, como le dicen los hinchas, se terminó de pintar el 29 de octubre, un día antes de jugarse el segundo clásico del torneo. Un par de horas después fue llevado al estadio Rafael Mendoza de Achumani para mostrárselo al “10”, contó Gabriel Aliaga, uno de los integrantes de ese grupo.
“Como es tradicional en él, nos recibió con una sonrisa, primero en la cancha cuando ingresaba al vestuario luego de su entrenamiento, después en la entrada del predio y entonces saludó a todos los que fuimos. Nos agradeció. ‘Esto es una sorpresa para mi’, nos dijo, y además nos prometió que cuando viera esa bandera en el estadio ‘y si me toca convertir algún gol, voy a ir a festejar ahí’”, contó Gabriel.
“Para nosotros fue doblemente emotivo ese tanto, porque Pablo cumplió su promesa. Demostró que él siente los colores, vive el amarillo y negro. Es un Tigre más. Ya era goleada, pero gritamos con todo ese tanto específicamente”, agregó.
Por primera vez la bandera fue llevada al estadio justamente para el clásico, “pero la Policía no nos permitió colgarla, por su tamaño, porque hubiera perjudicado la visión de la gente”.“Viajó” hasta Potosí para el partido con Real, pero por el mismo motivo no permitieron que ni siquiera la metieran al estadio.En el último tiempo no se presentó la oportunidad por la seguidilla de partidos que el equipo jugó en el interior y por fin el lunes se la pudo colgar en el Hernando Siles.La idea de hacerle una bandera a Escobar surgió hace más de un año, “pero por diferentes motivos no pudimos consolidar ese deseo, hasta que hace unos dos meses nos propusimos empezar y luego terminarla”.
Gabriel Aliaga manifestó que “ha sido una iniciativa de todo el grupo como un homenaje a Pablo, que tanto ha dado por el club y lo sigue haciendo. Han sido muchas las alegrías que nos ha dado y además es una persona respetuosa con la hinchada”.
No obstante de que la decisión fue de varios hinchas, “solamente Wilmer fue el encargado de pintarla, aunque primero dibujó la imagen. Se demoró alrededor de dos semanas en hacer todo”.
El costo de la tela y de las pinturas fue de más o menos 150 bolivianos. “La barra hace aportes para distintas actividades y para pintar otras banderas o murales en la calle siempre hay un monto del que disponemos”. (14/12/2016)
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