Las cargas en el trabajo físico en The Strongest empezaron a bajar ayer por la tarde. Después de cuatro días de mucha intensidad, los jugadores empezaron a tener contacto con balón, contó el preparador físico Jorge Salas. Por la mañana el grupo realizó una tarea de potencia y fuerza con bandas elásticas. La sesión se complementó con unos ejercicios de potencia abdominal.
Después de los quehaceres en campo, los jugadores fueron sometidos a baños con hielo (crioterapia), “eso es para ayudar a la recuperación”, sostuvo Salas.
Por la tarde, la plantilla empezó a trabajar con balón; aunque la siguiente semana serán las sesiones de fútbol y el trabajo táctico. Los cuatro refuerzos: Diego Bejarano, los uruguayos Luis Maldonado y Matías Alonso, y el argentino Mariano Torres, cumplieron una sesión extra en gimnasio antes del almuerzo, para nivelarse con el resto de los integrantes de la plantilla.
“Ha sido un trabajo exigente el que hemos realizado en estos días, los jugadores me deben estar odiando”, matizó Salas, una manera de reflejar lo sucedido en estos días. Al margen de las tareas en campo, arena, césped sintético, gimnasio y pliometria (saltos con desniveles para mejorar la fuerza del tren inferior), la labor física de la primera semana incluyó un entrenamiento en el cerro aledaño al complejo de Achumani.
La actividad física continuará hasta mañana, con menor intensidad, pues los futbolistas han sentido la exigencia. Más de uno reconoció que se siente muy agotado. El golero Daniel Vaca admitió que esta etapa de los entrenamientos es la que menos les gusta a los jugadores, sin embargo agregó que es necesaria y “somos conscientes de que es la base y el sustento de nuestro físico para el resto del semestre”.
Dijo que el plantel siempre ha hecho una buena tarea física antes de iniciar las competencias oficiales “y ahora estamos por el mismo camino”. Puso de ejemplo lo sucedido en el torneo Apertura, que finalizó el 20 de diciembre. “No recuerdo que (los adversarios) nos hayan superado por temas físicos”, manifestó.
Alejados del grupo trabajan Abraham Cabrera y Diego Wayar, quien sufre un desgarro de segundo grado en la parte posterior del muslo izquierdo y ha sido descartado para los primeros partidos de la Liga. Cabrera, en cambio, fue operado en octubre de la rodilla derecha y su retorno a las canchas demandará un par de meses más.
El dato
En espera
Las gestiones para contratar dos refuerzos más sufrieron un alto, hasta que César Salinas regrese de Europa.
Carlos Neumann admite que está en deuda
El delantero paraguayo Carlos Neumann admitió ayer que está en deuda con la hinchada de The Strongest, y que el torneo Clausura de la Liga, que comenzará la siguiente semana (el Tigre visitará a Blooming el domingo), y la Copa Libertadores de América serán una revancha para poder confirmar sus condiciones.
Neumann, quien llegó al Tigre en julio, dijo ayer en conferencia de prensa que ha realizado una evaluación de su producción en el torneo Apertura y ha concluido en que “las cosas no salieron como me había planteado antes”.
El atacante participó en 18 de los 22 partidos que jugó el Tigre en el torneo y convirtió ocho goles —los mismos que Pablo Escobar—, tres menos que Rodrigo Ramallo (11), el máximo anotador. “No llegué al 100% como la gente y yo esperábamos; pero como siempre se dice en el fútbol, ahora tengo una revancha, voy a tratar de aprovechar la oportunidad que se presenta y esta vez llenar las expectativas”.
Jugar la Copa Libertadores será una motivación aparte para Neumann, en ella intentará “demostrar a los seguidores” por qué los dirigentes lo trajeron al Tigre; aunque dijo que antes de pensar en el torneo internacional, en el que el aurinegro debutará el 17 de febrero, debe concentrarse primero en el trabajo físico que en estos días realiza el plantel para poder llegar de la mejor manera al inicio del campeonato de la Liga y después al de la Copa. Ganarse un puesto en el equipo —aseguró— será más complicado ahora con la llegada de los refuerzos, uno de ellos, el uruguayo Matías Alonso es atacante.
“Siempre hay una competencia sana entre nosotros, en la que cada uno tiene que dar lo mejor, estar bien y poder ser considerado”, manifestó. En una prueba del trabajo leal que realiza deseó suerte a sus compañeros que llegaron al club y ofreció “ayudarlos a que se adapten rápido”.
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