Era para golear, no para perder

The Strongest dejó escapar de sus manos la victoria, porque fue ampliamente superior y hasta podía conseguirla por goleada; sin embargo, no liquidó cuando podía y terminó perdiendo ayer en su visita a Yacuiba frente a Petrolero (2-1), que atacó mucho menos y sin embargo dio vuelta el marcador.

El colombiano Diego Bacca fue el héroe de la afición local por anotar los dos goles, el segundo de ellos cuando el encuentro estaba por expirar.

Fue un partido fácil para el gualdinegro, sobre todo en el primer tiempo que dominó de principio a fin, y fue en esa etapa en la que tuvo más chance de convertir desde el primer minuto, en el que Méndez desperdició una buena ocasión, hasta el último (47’), cuando ya en la adición por fin abrió la cuenta a través de Ramallo.

Pero todo lo bien que hizo, el mismo The Strongest lo echó por la borda. Por ejemplo, por lo menos durante 40 minutos del primer periodo lo tuvo a Petrolero contra las cuerdas, como si fuera boxeo le pegaba y pegaba, aunque no terminaba de tumbarlo. Dominaba, tenía buena salida, deambulaba por el área, generaba jugadas profundas y varias con sello de gol, pero nada.

Solo en los últimos cinco minutos, el yacuibeño se animó y fue cuando, sin merecerlo, casi abre la cuenta mediante un cabezazo de Alpire, quien mandó la pelota al travesaño (42’), y un minuto después él mismo enfrentó a Daniel Vaca y remató desviado. Finalmente, a los 47’ Escobar se fue hasta el fondo tras un pase de Méndez, mandó el centro y Ramallo con la cabeza —de palomita— embocó.

En la segunda mitad, la estrategia de tocar y tocar mantuvo al Tigre como dominador del juego e incluso llegó fácil hasta el área contraria. Pero fue Petrolero el que hizo el gol (16’) con un muy bien colocado disparo de Bacca para colgar al guardameta stronguista (1-1).

A partir de ahí, el local agarró más fuerza y el partido se hizo de ida y vuelta; sin embargo, en cuanto a opciones, la sensación era la misma: The Strongest estaba más cerca de pasar al frente (hubo un palo tras un tiro libre de Escobar, una definición que pasó cerca de Ramallo y una buena atajada de Peñarrieta ante Escobar).

Pero de contragolpe, Petrolero halló la llave: Martínez se iba solo y le cometieron falta (penal que el árbitro no cobró). Bacca le sacó tajada al tiro libre (43’) para convertir el 2-1. Más claro que nunca se dio lo que tantas veces se dice en el fútbol, y es que el que perdona muere.

La figura - Diego Bacca

Entró en el segundo tiempo y se convirtió en el verdugo del Tigre. Anotar dos goles no es poco, sobre todo si son los de la victoria.

El árbitro - Regular

Joaquín Antequera se equivocó mucho —igual que sus asistentes, que estaban en otra—. De hecho, no cobró un penal para Petrolero.

Los datos

Comparación

The Strongest tuvo por lo menos media docena de opciones de gol y metió solo uno. Petrolero, la mitad, y fue más efectivo.

Para los dos

La lluvia arruinó el campo de juego, que empeoró por el trajín. The Strongest parecía que se había acomodado mejor; sin embargo, al final Petrolero tuvo más pierna.

Desde la banda

Un asistente, Juan Pablo Flores, se equivocó seguido. Cobró varias posiciones adelantadas inexistentes.

La opinión de:

David de la Torre: ‘No le ganamos a cualquiera’

“En el primer tiempo fueron superiores, les cedimos la iniciativa; pero en el segundo empezamos a jugar más por los costados, después entró Diego (Bacca) con la calidad que tiene, y pudimos revertirlo. Hay que destacar lo que hizo el equipo porque le ganamos a The Strongest, no a cualquiera”.

Óscar Craviotto: ‘Jugamos bien; no convertimos’

“Perdimos porque arriesgamos demasiado. Jugamos bien, pero no convertimos los goles que teníamos que convertir. No soy de hablar del arbitraje, pero no lo vi parcial al juez, para nada. Queda un sabor amargo, por todo lo que pasa: el partido y la situación del club”.