Chumacero está listo para vestirse de rayado

La transferencia de Alejandro Chumacero seguirá dando que hablar, más ahora, cuando desde Paraguay, el empresario de jugadores Alberto Romero afirmó a Deportes El Diario que realizó las negociaciones en La Paz y que todo está sellado entre el Necaxa y The Strongest.

El viernes al mediodía, el periodista Gonzalo Cobo en el programa Futbolmanía afirmó que la negociación entre The Strongest y el Necaxa estaba cerrado y que se iba a confirmar posteriormente. Pero, algo pasó, porque lo que estaba oleado y sacramentado pareció caerse; sin embargo, desde Asunción del Paraguay, el agente de jugadores Alberto Romero confirmó que la transferencia de Alejandro Chumacero al Necaxa se concretó y que no hay ninguna duda en torno a la negociación porque se definió con el jugador y con el presidente del club, César Salinas, en conversaciones directas. “Los dos clubes llegaron a un acuerdo y se cerraron las negociaciones. Chumacero hizo una exigencia en dos puntos que restaban por cumplir, faltaban esos dos aspectos pero se descuenta que estará en el Necaxa”, afirmó el paraguayo.

Romero incluso fue más allá al manifestar que Chumacero ha firmado un preacuerdo, por lo cual sus derechos están garantizados en beneficio del Necaxa. “Nosotros lo dimos por cerrado, el traspaso está hecho al Necaxa”, señaló el paraguayo, quien recalcó que “este es un logro del fútbol boliviano, porque se está abriendo una puerta para el fútbol de este país en un mercado competitivo; es un jugador boliviano que llega a un club importante, esperemos que no sea el único que llegue, le puede abrir las puertas a otros”. Los últimos detalles que restan, para firmar el documento final, son que pase la revisión médica, luego será presentado como jugador rayado, dijo Romero. En tanto que desde Santa Cruz, el agente Silvio Fontana, mencionó que el traspaso no está consumado y que la próxima semana llegará a The Strongest una interesante propuesta de Europa. “Solo queda esperar, pero no está cerrado lo del Necaxa”, comentó escuétamente sin dar mayores razones.